Con el tiempo, tu cartera de acciones y bonos probablemente variará en sus porcentajes debido a los movimientos en las cotizaciones. Esto significa que tendrás un riesgo distinto por variar el ratio acciones/bonos. La cartera necesitará entonces volver al riesgo inicial para considerarla bien balanceada.
El rebalance es el método principal que dispones para mantener en todo momento el riesgo de tu cartera de inversión. Rebalancear significa ajustar tu portafolio a los porcentajes originales que elegiste para él.
El rebalance también añade la ventaja de obligarte a comprar barato y vender caro. Si una clase de activo baja de precio, al tener que comprar más cantidad de esos activos, te estarás forzando a comprar a bajo precio. Los inversores sin una estrategia de rebalance son más propensos a reaccionar emocionalmente y realizar justo lo contrario, cometiendo el error de vender barato con el miedo y comprar caro ante la euforia generalizada.
Existen dos formas básicas de rebalancear una cartera:
Rebalancear por calendario. (Utilizo este método en mi Cartera Boglehead)
La forma más sencilla de rebalancear una cartera es hacerlo simplemente una vez al año, por ejemplo, el día de tu cumpleaños. Esperar más puede implicar el riesgo de estar durante mucho tiempo con una cartera menos acorde a tu nivel de riesgo.
Esta forma de rebalancear tiene como ventajas:
– Requiere poco tiempo de gestión. Con una hora al año tienes suficiente.
– Tampoco requiere monitorizar tu cartera. Una vez rebalanceada no tienes porqué mirarla hasta el siguiente año.
– No mirar la cartera a diario te ayuda a seguir fuerte en el camino, limitando tus tentaciones de operar.
Rebalancear usando bandas de porcentajes. (Recomendada por Browne para la Cartera Permanente)
Después de un año, puede ser que tu cartera haya cambiado poco. Si así fuera, puede ser que prefieras dejar el rebalance para cuando los activos se hayan comportado de forma más volátil. Así pues, una regla extendida para rebalancear carteras convencionales es hacerlo cuando una de las clases de activos cambie en su porcentaje un 10%. Por ejemplo, si tienes un 40% en bonos, si estos superan el 44% o bajan del 36%, la cartera debe ser balanceada.
Esta forma de rebalancear tiene como ventajas:
– Ahorra en costes ya que el número de operaciones se reduce.
– Incrementa el beneficio de comprar barato y vender caro, llevándolo casi al extremo posible.
Otras consideraciones acerca del rebalance.
– Cada uno debe elegir su método de acuerdo a sus prioridades, que pueden ser: el tiempo disponible, el ahorro de costes, gusto por la simplicidad, nerviosismo al mirar la cartera a menudo,…
– Una forma sencilla de rebalancear carteras de cantidades humildes es simplemente añadir el capital ahorrado a la clase de activo devaluada. Si la cartera tiene un tamaño importante, probablemente necesitarás pasar capital de unas clases a otras.
– Si ya estás retirado y no piensas añadir capital a tu cartera, el método puede ser el mismo pero a la inversa. Cuando saques dinero de ella en forma de renta, tómalo de la clase más apreciada.
Espero que esta serie de entradas dedicadas a conceptos básicos de inversión te estén ayudando a recordar estos principios tan importantes. ¿Tienes tu cartera diversificada por clases de activos? ¿Qué estrategia de rebalance usas o piensas usar? ¿Piensas que decubrir estos sencillos métodos te ayudó a mejorar tu calidad como inversor?
Yo he leído acerca de dos métodos más para «comprar barato y vender caro»:
el DOLLAR-COST AVERAGING (invertir una cantidad fija periódicamente)
y el VALUE AVERAGING (trazar la evolución del activo según su rentabilidad media teórica, y tomar esto como referencia para ir corrigiendo su rentabilidad real)
Tanto el Value Averaging como el rebalancing se basan en la suposición de que una clase de activo tiene una determinada rentabilidad esperada y que a largo plazo las fluctuaciones de su valor siempre van a volver a esa rentabilidad típica (a esto lo llaman RTM: Return To Mean: retorno a la media)
Si esta suposición falla, el rebalancing o el VA podrían disminuir la rentabilidad. La cosa es al parecer muy improbable, pero me parece que es lo que ha sucedido con el mercado japonés en las dos últimas décadas, tema del que ya se habló en otra entrada.
@Juan, creo que fue en Four Pilars of Investing que leí una opción que era algo así como, yo quiero invertir 200 euros cada mes mas o menos, con lo cual debería conseguir 200 euros el primer mes, 400 el segundo, 600 el tercero y así sucesivamente. De esta forma si al segundo mes la renta variable sube un 10%, tendré 220 euros y deberé ingresar en la cartera de inversión sólo 180 euros para llegar hasta los 400. Es una manera de ir metiendo dinero, comprando más cuando la bolsa baja y menos cuando sube.
@Antonio
Creo que un aspecto fundamental del rebalance (y de las inversiones en general), y que va ligado al tema del ahorro de costes, es la fiscalidad.
Pienso que las ventajas de ahorro de costes en los ETFs se reducen bastante al tener que pasar por Hacienda cada vez que vendemos.
Si, por ejemplo, tenemos una cartera permanente y tenemos que vender oro al rebalancear (supongo que tenemos un ETF de oro físico), tendremos que pagar el IRPF sobre el beneficio de las participaciones que vendamos, con lo que parte de nuestro capital se perderá por el camino.
Una forma de evitar esto es tener fondos de inversión en lugar de ETFs, aunque para el caso del oro creo que no existen (por eso lo pongo como ejemplo). Con que tengamos un ETF, tendremos que pasar por caja cada vez que traspasemos dinero en una dirección u otra hacia ese activo.
¿Se os ocurre alguna forma de minimizar el impacto fiscal en los rebalanceos?
Por cierto, otra desventaja que veo a los ETF es que la comisión de gestión que te ahorras al final te la cobra el broker por la custodia y compra/venta de los títulos.
¿Conocéis algún broker que cobre por título y no por nominal para la custodia? Me explico, que te cobren la misma cantidad fija por cada ETF independientemente de si tienes 1000 euros o 50000
@Jorge, en Renta4 pagas una comisión de custodia de valores internacionales fija de 2,5€ al mes, independientemente de los valores que tengas y la cantidad. Eso hace que, cuando tu cartera aumenta, el porcentaje de custodia tiende a CERO.
@jorge, para valores americanos clicktrade cobra un fijo por títulos en la CV y no cobra custodia, aunque personalmente no me termino de fiar de ese broker.
@Jorge
¿una forma de minimizar el impacto fiscal en los rebalanceos?
A ver, existe un truco, que si lo he entendido bien es el siguiente:
Vas a hacer el rebalancing y resulta que del ETF Tururú Value tienes que vender 2000€ que son aumento de valor. Okey, los vendes.
Al mismo tiempo ves que tienes un ETF, el Tarará Dividend, que ha visto disminuído su valor en 1200€. Vale. Coges y vendes este ETF también y lo substituyes comprando el ETF Tararí Dividend, que es similar pero no idéntico al Tarará Dividend, y su cotización es prácticamente la misma.
Lo compras, haces tu revalance y dejas todo cuadrado.
A la hora de pagar a Hacienda resulta que tienes una ganancia de 2000€ y una pérdida de 1200€. Resultado: la ganancia es solo de 2000-1200=800€ y sólo sobre esos 800€ se te aplicará el impuesto de rentas de capital.
Así al parecer lo hacen en América y supongo que se podrá hacer en España también.
¿Vale la pena tanto trasiego de compras y ventas? Juzga tú.
@Juan, justamente ese método se me ocurrió dándole vueltas al tema de los ETFs (lo comenté en una entrada por aquí hace tiempo), y luego leí a Rick Ferri que ya estaba inventado hace siglos xD (por cierto, muy muy recomendable su libro de «All About Asset Allocation»). El problema aquí es encontrar los ETFs adecuados para hacerlo, que no tenemos tantas opciones…
@Juan
Interesante método, habría que ver si merece la pena al tener que hacer más operaciones y por tanto pagar más comisiones. Seguramente dependerá de la situación de cada uno como los volúmenes que maneje.
Una duda que tendo sobre el rebalance y los aportes periódicos:
Suponed que tengo unos fondos bien promediados y que no hago rebelanceo hasta el año que viene. Sin embargo cada mes quiero hacer unas aportaciones a cada fondo, siempre idénticas (dollar-cost av.).
La pregunta es si he de comprar la misma cantdad para cada fondo (pensemos el mínimo de Selfbank para cada fondo de 150 euros), o esta (ide´ntica cada mes) ha de ser proporcional al objetivo final del rebalanceo. Me explico mejor:
Si del fondo A quiero tener un 25%, del B un 35% y del C un 40%, y si quiero aportar 1000 euros al mes a los fondos:
a) aporto 1000/3 euros a cada uno mensuales? ó
b) aporto 250 euros al A, 350 al B y 400 al C?
c) aporto lo que puedo cada mes, rebalanceando con el aporte?
En cualquiera d elos dos casos, con independencia de tener que rebalancear al cabo de un año.
La opción b sería algo más difícil cuando el banco te exige un importe mínimo para cada compra, tya que habría que eespera rvarios meses para tener la cantidad suficiente para aportar proporcionalmenet a cada fondo.
Espero que me aclaréis este tema que es fundaental para mí.